El Director de Investigación del Servicio de Neuro-Oncología del Hospital Oncológico MD Anderson, Houston (Texas) impartió la conferencia inaugural del 46 Congreso Nacional de SEMERGEN que se celebra en Bilbao

Nekane Lauzirika vía #ElMédicoInteractivo

«Hay que olvidarse de las metáforas para referirnos al cáncer. A todo lo malo que sucede en el mundo se le denomina cáncer y eso ayuda muy poco a normalizar esta patología que camina hacia una cronificación de la misma», explica en una entrevista concedida a EL MÉDICO INTERACTIVO por el profesor e investigador Juan Fueyo Margareto.

Este especialista en neuro-oncología ejerce en el Hospital Oncológico MD Anderson, Houston, Texas (EE.UU), y fue el ponente de la conferencia inaugural del 46º Congreso de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) que se desarrolla en el BEC de Barakaldo con la participación de más de 5.000 especialistas.

Su ponencia versó sobre «El cáncer y sus metáforas». «Unas metáforas que hacen mucho daño a los pacientes, porque se les estigmatiza y, en ocasiones, por miedo, tardan en llegar a consulta, lo que conlleva un peor pronóstico», señala en la entrevista.

Llama la atención ver a un investigador de Houston entre los ponentes. ¿Es posible la investigación en AP o es un camino aún a recorrer?

He escrito un libro que se llama “Cuando el mundo se detiene” que habla de las reflexiones sobre el cáncer, y  tal vez sea este uno de los motivos por el que me han invitado a hablar. Por otro lado, creo que también la Medicina de Familia hace cada vez más investigación. Lo que haga un investigador, por ejemplo como yo,  no supone que esté en un extremo total de lo que es el espectro médico y ellos en el otro, sino que de alguna manera nos juntamos.  Y eso está muy bien ya que nos viene un tsunami de casos de cáncer. Y nos llega por dos motivos. Uno es porque está aumentando la supervivencia. Los pacientes que tienen cáncer cada vez viven más tiempo, va a haber un gran numero de supervivientes de cáncer de aquí al 2040 que irán a las consultas, porque seguirán teniendo  problemas por el tratamiento, secuelas que requerirán ser tratados como crónicos… y muchos irán a la Atención Primaria. Por otro lado, van a aumentar también debido al cambio climático.

Con el envejecimiento poblacional, los cánceres estarán más presentes que nunca. Usted que es neuro-oncólogo,  ¿cómo cree que debiera ser la atención  en AP?

La atención neuro-oncológica ha de ser llevada por un especialista y hacerse en los hospitales más punteros. Pero una vez que los tratamientos se han puesto en los centros, estos pacientes pueden ser controlados en los centros de AP de forma muy precisa, como ya ocurre actualmente. Pero la cuestión es que van a llegar más pacientes de estas características porque los hospitales estarán desbordados por el número de casos. Los médicos de familia se encargarán cada vez más y más del tratamiento de estos pacientes cronificados.

Trabaja en Houston, pero conoce nuestro sistema. ¿Cómo es la relación entre la Medicina de AP y la hospitalaria? ¿Y cómo podría mejorarse?

El asunto es que cuando mejor funcionen los centros de Atención Primaria, cuando mejor esté la Medicina de Familia, mejor se hallarán los hospitales, porque  llegaran menos pacientes al hospital. El centro de primaria tiene que hacer el cribaje para seleccionar qué personas deben de ir a los hospitales y después encargarse de los crónicos, por ejemplo, para que no se saturen las urgencias. Por ejemplo, con el caso de la gripe. Ahora, en el invierno, vamos a tener más gripe que el año pasado. Si nos guiamos por las cifras que han tenido en Australia tendremos una epidemia de gripe enorme.  Si esto no se para por las vacunaciones en los centros de Atención Primaria, las urgencias se van a saturar muy pronto en el otoño-invierno. El centro de AP es crucial para hacer que todos los demás niveles  funcionen.El investigador Pueyo en la conferencia inaugural de Semergen en Bilbap

El investigador Juan Fueyo es neuro-oncólogo en el Hospital Oncológico MD Anderson, Houston, Texas

Existe la prevención en neuro-oncología cómo método. ¿ Se practica: dieta, ejercicio….? o  ¿Una cosa es el diagnóstico  y otra la prevención?

Exacto. Con buena prevención el 40 % de los tumores serían prevenibles. El asunto es que siendo muy buenos haciendo prevención en los factores de riesgo cardiovasculares, lo que está llevando incluso a que disminuyan las demencias cardiovasculares que están descendiendo porque la gente se trata la diabetes, el colesterol, etc. Sin embargo, para los factores de riesgo que tienen que ver con el cáncer no lo conseguimos. Hemos disminuido el tabaco, pero el alcohol sigue ahí, la excesiva exposición al sol sigue ahí, la polución aumenta, etc. Sí que hay cánceres que son prevenibles, pero no llegamos a ellos. Por cierto, sobre las máquinas de bronceado, ahora se sabe que están relacionadas con el cáncer de piel. Y en EE.UU. ya empieza a haber más cánceres de piel que cánceres de pulmón, porque la gente está dejando de fumar, pero cada vez está más de moda cuidarse, ponerse moreno y estar guapo. Y si para estarlo se recurre a la máquina de bronceado, estar guapo produce cáncer.

¿En su conferencia inaugural ha disertado del cáncer y sus metáforas. ¿A qué se refiere?

A que en los medios es bastante normal salir diciendo que el fascismo es el cáncer da sociedad, o que el marxismo es el cáncer del sistema; lo peor que te puedes imaginar es el  cáncer de lo que sea. Y esto no ayuda en nada al paciente. Si a todo lo peor que ocurre en el mundo le pones el nombre de cáncer, qué va a sentir un paciente cuando tiene esa enfermedad. Ahí, la metáfora va unida al estigma, y eso hace que mucha gente por temor llegue tarde al diagnóstico. La metáfora y el estigma de la palabra cáncer la han igualado ya a algo que mata y no es verdad. Mi libro se titula Cuando el mundo se detiene y no por culpa del cáncer, sino por lo que pensamos qué es el cáncer; se le paraliza el mundo cuando le dan el diagnóstico. La pregunta al doctor, «¿Cuánto tiempo me queda?» ya no tiene que hacerse, sino «¿Doctor, qué opciones tengo?», porque hay muchas.

He hablado con un médico de 30 años que ha superado varios cánceres. ¿Qué herramientas le daría, bien para superarlo o para vivir con él razonablemente normal?

Yo también he hablado  con muchas personas, una de ellas hace poco era un joven que tiene 30 años y un cáncer. La discusión ha sido si primero sería la cirugía o primero la radioterapia, cuál de estas dos cosas se hace antes; y qué es lo que viene después. En su caso, no hacía falta quimioterapia. Ahora un paciente que tiene cáncer tiene que entrar en un algoritmo diagnóstico y de tratamiento  de medidas racionales que están ahí y que se pueden aplicar en la mayoría de los sitios. ¿Cómo se hace eso? Cuanto antes se tenga esa información mejor será el diagnostico. Ese joven que dices que ha superado 6 cánceres probablemente requiere que le hagan  análisis genéticos y en ese caso sería también muy importante para su familia.

Suele escucharse mucho lo de curar el cáncer, ¿no sería mejor hablar de cronificar para seguir viviendo con una razonable calidad de vida? ¿Se va por ese camino? 

Tienes razón, es un poco como lo que se ha hecho con el sida. Del cáncer se habla que entramos en remisión, pero nunca sabes lo que puede pasar dentro de diez años. Pero sí, si el cáncer de convirtiera dentro de diez años  en una especie de diabetes o hipertensión que se pudiera controlar tomando una pastilla de vez en cuando sería lo ideal. Es hacia donde queremos ir. Es el objetivo más lógico y razonable, mucho más conseguible que el de pensar que vamos a erradicarlo. El cáncer es el precio que pagamos por la evolución, mientras nuestras células se sigan replicando vamos a tenerlo. La vida produce cáncer, será más fácil cronificarlo que curarlo. Efectivamente, creo que vamos por ese camino.Pueyo, profesor Houston dio la clase inaugural del Congreso de semergen enBilbao

Acaba de publicar su libro sobre el cáncer «Cuando el mundo se detiene”

¿Que nos puede contar del cáncer infantil o en población joven?

Empieza a aumentar el melanoma en niños, una cosa que antes no se veía. El cáncer es una cosa de personas mayores, a partir de los 50 era lo habitual. Ahora no, también es cosa de niños. Por ejemplo, el cáncer de colon se empieza  a ver en gente menores de 50 años, que antes no se veía y no sabemos por qué ocurre, ni los factores que lo generan, y nos estamos adaptando. Ahora ya hay hospitales oncológicos monográficos. En Houston donde trabajo tenemos un departamento para el cáncer de los jóvenes y ya empiezan a prepararse otros especiales para niños, porque tenemos que tener en cuenta que un niño no es un adulto bajito. Un niño es una persona completamente diferente a un adulto y requiere tratamientos diferentes,  y no estamos preparados.

Cambiamos de tema y me gustaría preguntar por la salud mental, que  está en el disparadero de los intereses sanitarios de la población. ¿Qué hacer para que los problemas neurológicos no vayan a más?

Está claro que hay un aumento de las enfermedades mentales, por dos cosas, primero porque la sociedad se ha concienciado más de que son enfermedades reales. También aquí estamos con el estigma, con la metáfora, lo que significaba estar loco y que afortunadamente esa palabra empieza a usarse menos. Y, por otro, la vida que llevamos con tanto sedentarismo, encerrados en edificios,  no disfrutando del mundo rural, todo ello provoca que haya enfermedades relacionadas con el trabajo. Por ambos motivos, cada vez se verán más enfermedades psiquiátricas.

Lo que estoy viendo es se está reaccionando a esta demanda y cada vez más aumentan el número de psiquiatras y/ de psicólogos, afortunadamente. Sí se trata de atender esta demanda de forma más eficiente, empezando en Atención Primaria.

Porque la Salud es lo que importa #PonSaludEnTuVida